El pasado sabado 30 de junio del 2012 cientos de sujetos miembros de la comunidad LGBT, es decir, Lesbianas, Gays, Bisexuales, Transexuales y Transgéneros decidieron marchar del Angel de la Independencia al Zócalo capitalino.
Por lo que las banderas
multicolores se dejaron ver a kilómetros, aunque considero ke hizo falta
más música y fiesta, sin embargo, apoyar a mis amigos fue excitante, me parece importante apoyar a quien considero
lo merece, es decir, estar ahí me permitió abrirme a una nueva experiencia,
conocer más acerca de esta comunidad, pero sobretodo, dar a conocer mi opinión
en contra de la HOMOFOBIA y que es necesaria la apertura para este grupo ya que
aún siguen siendo marginados debido a su preferencia sexual, en
cualquier ámbito, tan sólo durante la marcha la gente se quedaba viendo
con cara de horror e incluso escuché a un hombre decirle a su hijo:
"Vamonos rápido que esto está llenos de Putos Gays y Lesbianas".
Es por esto que decido
hacer también esta entrada de blog, para expresar mi inconformidad acerca de la
exclusión y repulsión que aún existe en la sociedad mexicana. Que aunque parece
ser más abierta, sólo es como dice Carlos Skliar en su texto: ¿Y si el
otro no estuviera ahí? Notas para una pedagogía (improbable) de la diferencia.
"...la Pedagogía de
las supuestas diferencias en medio de un terrorismo indiferente; y la
producción de un diversidad que apenas se atiende, apenas se entiende y apenas
se siente..."
"Decimos que estamos
frente a un nuevo sujeto. Pero, hay que decirlo, de un nuevo sujeto de la
mismidad. Porque se multiplican identidades a partir de unidades ya conocidas,
se extreman los nombres sobre nombres ya pronunciados, se autorizan, respetan,
aceptan y toleran sólo algunos pocos retazos del alma."
"Pero ni una palabra
sobre las representaciones como miradas.
Pero ni una palabra sobre
las metamorfosis de las identidades.
Pero ni una palabra sobre
la vibración con el otro.
El cambio ha sido entonces
la burocratización del otro, su inclusión curricular, su día en el calendario,
su folklore, su exotismo, su pura biodiversidad.
Y si en algún momento de
nuestra pregunta sobre la educación nos hemos olvidado del otro, ahora
detestamos su recuerdo, maldecimos la hora de su existencia…”
“Volvemos a creer que el
otro es un otro maléfico y que nuestra invención no estaba tan desacertada.
Volvemos a ignorar aquella ética del rostro de la cual nos hablaba Lévinas,
tenemos una responsabilidad con el otro, con su expresión, son su
irreductibilidad, con su misterio. Y volvemos, por último, a refugiarnos en
nuestra insulsa hospitalidad (hostil).”
¿Ustedes qué piensan?
Dejo abierta la pregunta para saber ¿Qué pasa con el Otro? Y cómo es que
estamos abriendo la posibilidad, los espacios, la mente frente a cuestiones del
sujeto y del Otro que ya no entran en la compresión cotidiana del género...
¿Hombres?, ¿Mujeres?, ¿Quimeras?, ¿Quién sabe? La construcción binaria del
género ha quedado completamente destruida. Porque hay cuestiones del humano y
del Cuerpo que quizá no comprendemos, pero que vale la pena saber si estamos
huyendo, excluyendo, ignorando, eliminando, o sólo nos y/o los refugiamos en la
esfera de la insulsa hostilidad.
He aquí
unas imágenes para que lo vayan considerando:
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